Al día de hoy, completar los estudios secundarios en modalidad Técnico Profesional (TP) permite una temprana entrada al mundo laboral. Sin embargo, continuar el perfeccionamiento en Educación Superior (ES) mejora considerablemente las condiciones socioeconómicas de las y los jóvenes TP de nuestra región y sus familias.
La educación TP concentra a la población más vulnerable, con un 82% de Índice de Vulnerabilidad Escolar a nivel nacional. Entonces, cabe preguntarse cuáles son los puentes hacia la ES para un estudiante de liceo técnico y cómo aseguramos la gratuidad para este segmento.
¿A qué continuidad de estudios se puede aspirar y cómo fortalecemos las trayectorias educativas hacia la ESTP? La gratuidad -que emana de la Ley de Educación Superior 21091- es un gran avance para facilitar el acceso. Ahora, los desafíos se encuentran en la organización del sistema.
El Acuerdo Nacional de Articulación es una herramienta que permite a las y los jóvenes egresados de EMTP, bajo ciertas condiciones, convalidar asignaturas en las diferentes instituciones superiores y hasta un semestre entero, en caso de estudiar una carrera afín a su especialidad.
Pero, además de la necesidad de orientar las trayectorias de las y los jóvenes, existen numerosos desafíos de Articulación para poner en marcha mecanismos de continuidad de estudios; de nuevo, relacionados con la organización misma del sistema educacional y su flexibilidad.
En este sentido, a través de la Red Futuro Técnico se ha constituido el Comité de Educación Superior con la participación de las 8 Instituciones de ES de la región. Aquí se proponen procesos de Formación en Alternancia para consolidar las orientaciones vocacionales.
Desde ONG Canales, en nuestro afán por mejorar las trayectorias de las y los estudiantes técnicos de la región, invitamos a que los establecimientos de EMTP y las Instituciones de ES dialoguen activamente y reflexionemos juntos. Más allá de las necesidades del corto plazo y la urgencia por conseguir matrícula, necesitamos pensar en conjunto un sistema flexible que permita convalidar aprendizajes y reorientar a los estudiantes, en caso de requerirlo, poniendo su bienestar al centro del debate, pensando es sus trayectorias formativas y laborales.